Pues sencillamente lo que parece: es, a grandes rasgos, el queso curado que vemos en los establecimientos antes de madurar, bueno, a grandes rasgos, ya que para mantenerlo fresco se fabrica de forma diferente a como se haría con uno que sí se fuera a madurar y básicamente el queso fresco se debe consumir antes de la fecha de consumo preferente que marca su etiqueta: ello nos va a garantizar que lo consumiremos de manera óptima, ya que de lo contrario nos encontraríamos con que el Queso Fresco comienza el periodo de transformación.
Bueno, eso sería una definición amplia, como he dicho anteriormente, pero para mí en particular el Queso Fresco -a parte de ser mi forma de "vida "- es mucho más que todo eso. Como me entusiasma el tema os diré que el Queso Fresco es más, que se tiene que ver mucho y catar y degustar para conocer sus increíbles aromas y sabores. Añadiré que se puede llegar a ser un "maniático" como los "sommeliers" con el vino o los expertos en jamones. En fin, que os animo a que probéis lo nuestro y aprendáis a distinguir los sabores y las texturas y veréis como no todos son iguales.
Imágenes cedidas por Queserías Romero Gozálbez S.L. marca: Jamesa